La matriz de cumplimiento de estándares establece 3 estadios: básico, adecuado y sobresaliente.
El nivel básico constituye el piso mínimo con el que deben contar los organismos para obtener la acreditación.
Los estadios adecuado o sobresaliente, detallan mayores verificadores que se espera que el colaborador ya acreditado pueda ir cumpliendo a través de una mejora continua en el tiempo, pero no tiene efectos sobre las posibles adjudicaciones de los procesos concursables, como tampoco en el eventual acceso a otros recursos.
La condición para presentarse a licitación y posterior adjudicación es estar acreditado.