Las Residencias de Vida Familiar de Ñuble se llenaron de música y armonía gracias a el Cuarteto de Cuerdas de la Orquesta Sinfónica de Ñuble, que llevó melodías clásicas a niños, niñas y adolescentes bajo cuidado alternativo.
La actividad se enmarca en un trabajo conjunto entre la Orquesta y la Dirección Regional del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, con el objetivo de acercar la cultura a entornos donde la restitución de derechos también se expresa a través del arte y la creatividad.
Al respecto, la directora regional del Servicio en Ñuble, Virginia Alvayay Neyra, destacó el valor de esta iniciativa precisando que "la música no solo emociona, también repara y acompaña. Para los niños, niñas y adolescentes, vivir esta experiencia es un recordatorio de que la cultura es un derecho, y que cada acorde puede sembrar alegría, fortalecer vínculos y abrir nuevas oportunidades. En cada residencia buscamos no solo proteger, sino también entregar felicidad y espacios para soñar."
Por su parte, Belén Rivas Luarte, coordinadora de la Orquesta. sostuvo que, "una de nuestras principales misiones es democratizar el acceso a la música y particularmente a la música clásica. Por eso recorremos las 21 comunas de la Región de Ñuble procurando llegar con este tipo de espectáculos. Estamos muy contentos y agradecidos de la recepción del Servicio de Protección por hacer este trabajo conjunto que sin duda enriquece a nuestra Región y les abre muchas posibilidades a los niños, niñas y jóvenes que participan de sus programas".
Con este nuevo paso, ambas entidades reafirmaron su compromiso de seguir acercando expresiones artísticas a niños, niñas y adolescentes, entendiendo la cultura como un pilar fundamental para su desarrollo integral.